Las macetas autorregantes son un práctico sistema para mantener las plantas en condiciones óptimas, nos permitirá olvidarnos del riego hasta por 6 semanas, dependiendo de las condiciones climáticas, el tamaño de la planta y maceta y de las especie plantada. 

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Las macetas de autorriego son un sistema que mantiene la humedad constante. Están construidas de fibra de vidrio, material resistente e inofensivo para las plantas. Se componen de un doble fondo, lo que divide un macetero en 2 contenedores, el espacio inferior sirve de depósito de agua, donde salen unas mechas que se conectan con el contenedor superior y con la tierra, por tanto, con las raíces. De esta manera las mechas se empapan con el agua que ponemos en el estanque de agua y las mismas raices van absorbiendo la humedad que necesitan.

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El agua se introduce por el tubo de llenado, depositándose en el estanque. Todos los maceteros autorregantes incluyen un marcador que nos indica el máximo y el mínimo de agua que requiere la planta, es decir, la cantidad de agua que debemos poner en el estanque de agua. 

Dado la gran diversidad de tamaños, colores y formas, este tipo de macetas no solo es práctico y sencillo de usar, si no que también es un excelente elemento de decoración. 

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Recuerde siempre que el requisito para instalar macetas autorregantes es mantenerlas en lugares techados o semi techados, dado que, al no contar con sistema de drenaje, al estar expuestas al riego constante por un lugar que no sea el tubo de llenado, se corre el riesgo pudrición de la planta. 

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